Tres años después de la cumbre histórica en Nueva York, en la que los Estados miembros de las Naciones Unidas adoptaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el «Índice ODS 2018» (SDG Index & Dashboards) presenta, por vez primera, una evaluación de los esfuerzos gubernamentales para lograr los ODS. El análisis demuestra que no hay ningún país que esté por el buen camino para alcanzar los Objetivos en 2030.

Además, el estudio permite conocer los mecanismos de implementación puestos en marcha por los países del G20. De estos, Brasil, México e Italia son los que han dado los pasos más relevantes para avanzar los ODS, por ejemplo, con la definición de Estrategias ODS o la creación de unidades de coordinación en sus gobiernos. No obstante, las carencias en los medios de implementación en el G20 son todavía enormes, ya que solo India y Alemania han desarrollado evaluaciones de las necesidades en inversión. Ningún país del G20 ha alineado aún sus presupuestos nacionales con los ODS. Según los datos del estudio, Estados Unidos y Rusia son los países que menos acciones han desarrollado para implementar los Objetivos.

La edición 2018 del SDG Index, titulada «Responsabilidades globales: implementando los Objetivos de Desarrollo Sostenible», es la tercera edición de este balance anual elaborado por la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible (SDSN) y la Fundación Bertelsmann. El SDG Index – un ranking mundial que mide el avance de los ODS en 193 países – está encabezado por Suecia, Dinamarca y Finlandia. Estos tres países escandinavos están en el buen camino para lograr los ODS, pero aún les queda mucho trabajo para alcanzarlos en el 2030. Alemania y Francia son los únicos países del G7 en los diez primeros puestos, y Estados Unidos cae hasta la posición 35. La República Democrática de Congo, Chad y la República Centroafricana están en los últimos puestos del ranking. España se encuentra en el puesto 25. El resultado no es comparable con la edición anterior – en la que ocupábamos el mismo puesto – ya que el índice de 2018 incluye nuevos datos e indicadores.

Con el fin de medir los progresos desde la aprobación de la Agenda de los ODS, por primera vez el SDG Index introduce tendencias. Éstas muestran si un país está avanzando en la consecución de un determinado ODS. En general, la mayoría de países están realizando avances, pero estos son más lentos en los objetivos medioambientales. Aunque muchos países de renta alta prácticamente han erradicado la pobreza extrema o el hambre, sin embargo obtienen bajas puntuaciones en objetivos como «consumo y producción responsable», «acción climática» o «protección de la vida submarina». Los países de renta baja han realizado avances considerables en la erradicación de la pobreza, el acceso a la salud o a la educación, pero todavía tienen retos en infraestructuras o en los mecanismos para gestionar las problemáticas ambientales. Por ello, su puntuación general se mantiene todavía muy por debajo de los países de renta alta.

Junto al análisis global, el SDG Index ofrece unas fichas por cada país (por cada uno de los 193 Estados miembro de la ONU) en las que se detalla el grado de cumplimiento de cada uno de los indicadores que determinan los avances. Como demuestran estas fichas, algunos países tienen grandes lagunas en los datos, algo que deberá subsanarse con mayores inversiones en datos para los ODS.

Resultados para España

La media obtenida de los indicadores, así como su tendencia, permite calificar cada ODS con un código de colores. El grado de consecución de los Objetivos se valora con el verde, amarillo, naranja o rojo, según vaya de mejor a peor.

En el caso de España, nuestro país no aprueba ninguno de los 17 ODS, puntuando especialmente bajo en los Objetivos 9 (innovación), 12 (consumo y producción), 13 (cambio climático) y 14 (vida submarina). Sin embargo, España muestra una tendencia positiva en cinco de ellos (salud, igualdad de género, gestión del agua, energía y acción climática). El informe también muestra, en el análisis de tendencia, que estamos retrocediendo en los Objetivos relativos a la lucha contra las desigualdades y en las alianzas para lograr los ODS.

Los datos muestran que el estancamiento de la Ayuda Oficial al Desarrollo y de la inversión en investigación, la elevada tasa de desempleo o la falta de una estrategia activa para la protección del océano, afectan a los resultados de España en relación a la escena internacional y, en particular,  con los países de la Unión Europea.

Ver panel de España con los resultados para los 17 ODS.

Solo se alcanzarán los ODS a través de una acción coordinada

«Una vez más, los países del norte de Europa encabezan la lista del SDG Index y los países más pobres quedan los últimos», explica Jeffrey Sachs, director de SDSN. «Las implicaciones son muy claras: la filosofía de la economía social de mercado que equilibra el mercado, la justicia social y la economía verde es el camino de los ODS. Los países atrapados en la pobreza extrema necesitan más ayuda del resto del mundo», continúa Sachs.

«El informe muestra el papel fundamental de los países del G20 para lograr los ODS. Los países ricos tienen que actuar de manera ejemplar y reducir sus efectos secundarios sobre otros, a la vez que ponen en marcha medidas para integrar los Objetivos en sus políticas nacionales» afirma Aart De Geus, CEO de la Fundación Bertelsmann.

«Las principales mejoras en la edición de 2018 han sido, por un lado, la introducción de un análisis de tendencias, y por otro, la ampliación del número de países estudiados hasta 193, la totalidad de Estados miembros de la ONU. Todo esto ha sido posible gracias a las aportaciones y sugerencias de gobiernos y otros actores de todo el mundo. Saber si un país está bien encaminado para lograr los ODS ayudará a políticos, empresarios y sociedad civil a identificar las principales prioridades para la acción» explica Guido Schmidt-Traub, codirector científico del SDG Index (SDSN).

«En 2018 España ha trabajado de manera satisfactoria desde varios ámbitos: la universidad, las empresas, la sociedad civil y los distintos niveles de la administración, sin embargo, los resultados del informe nos muestran que aún queda mucho camino por recorrer», afirma Miguel Ángel Moratinos, presidente de REDS. «No obstante, el reciente nombramiento de una alta comisionada para la Agenda 2030 por el Gobierno y la creación de un ministerio de Transición Ecológica son buenas señales para que España pueda mejorar el próximo año su posición».

Fuente: https://www.compromisorse.com