El Gobierno vasco ha aprobado este pasado martes el nuevo Plan de Prevención y Gestión de Residuos de la Comunidad Autónoma del País Vasco 2020, cuya aplicación permitirá reintegrar de nuevo al proceso productivo 3,5 millones de toneladas de residuos, dejar de producir medio millón de toneladas de residuos para el año 2020, y reducir sensiblemente la eliminación en vertedero», ha destacado la consejera de Medio Ambiente y Política Territorial, Ana Oregi.

El nuevo Plan de Prevención y Gestión de Residuos 2020, «un ambicioso instrumento de gestión» basado en el concepto de «economía circular», establece cinco objetivos estratégicos que se despliegan en 140 actuaciones concretas, y que a su vez definen indicadores específicos para las diferentes corrientes de residuos. Para llevar a cabo todo ello, cuenta con un presupuesto de 6,5 millones de euros.

El primero de los objetivos es el de la prevención. «No hay gestión más eficiente de un residuo que la de prevenir su generación», ha afirmado Oregi. Actualmente, en Euskadi se generan cinco millones de toneladas de residuos al año. El 80% de estos residuos proceden del sector de la construcción y de la industria. El plan prevé una reducción del 10% para el año 2020, lo que se traduce en medio millón de toneladas de residuos menos.

«Puede parecer una cifra poco significativa -ha añadido Oregi- pero sin este Plan y con el ritmo de generación de residuos que tenemos, en 2020 no estaríamos hablando de medio millón de toneladas de residuos más, estaríamos hablando del doble».

El Plan también fija objetivos para incrementar la recogida y la separación selectiva de residuos hasta un 75%, y para aumentar la preparación para la reutilización, el reciclaje y la valorización de residuos hasta en un 60%.

Oregi ha señalado que «debemos seguir trabajando en potenciar el reciclaje de los residuos industriales, sin olvidarnos de los residuos generados por la ciudadanía, que suponen un no despreciable 20%. El camino para ello es impedir el vertido de todo aquello que sea reciclable o valorizable».

El Plan apuesta «decididamente» por reducir al máximo la eliminación de residuos en vertedero y por minimizar el impacto de los vertederos existentes. Para ello, se aumentará la vigilancia y se prohibirá el vertido de aquellos residuos que puedan aprovecharse, y se contempla, además, el estudio de un canon de vertido para aquellos no valorizables.

Se estima que el valor de los materiales que se depositan cada año en los vertederos del País Vasco asciende a 47 millones de euros, lo que equivale al coste de 1.500 empleos medios anuales

Fuente: http://ccaa.elpais.com/