La Ley de Residuos y Suelos Contaminados, que prevé  entre otras medidas ,la desaparición de las bolsas de plástico, ha superado su primer trámite parlamentario, con el rechazo mayoritario de la Cámara a las dos enmiendas a la totalidad planteadas por ERC-IU-ICV y el PP, para que el proyecto de ley sea devuelto al Gobierno.

En concreto, las enmiendas a la totalidad presentadas han contado con el rechazo del PSOE, PNV, CiU, CC y UPyD, con la abstención del BNG y NaBai, y el apoyo del PP y ERC-IU-ICV. Además, el Hemiciclo ha rechazado su avocación a Pleno, de forma que esta futura normativa pasará al Senado una vez le de el visto bueno la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara Baja.

La ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, ha defendido el proyecto de ley del Gobierno, que transpone la directiva marco europea de gestión de residuos y suelos contaminados.

Así, ha explicado que el texto del Ejecutivo configura los instrumentos necesarios para llevar a cabo la política de residuos en España, al mismo tiempo que supone una apuesta «clara» por la prevención, la reutilización, el reciclado y otras formas de valorización de residuos frente a la eliminación.

Según ha destacado, el objetivo del proyecto es avanzar hacia la sociedad del reciclaje y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, en consonancia con la política de lucha contra el cambio climático. En este sentido, ha detallado que el proyecto ha sido sometido a un «exigente proceso de participación», en el que se han valorado más de 1.500 alegaciones procedentes de organizaciones, sectores, ONG y particulares.

«No se pueden imaginar muchas de ellas confrontadas entre sí e irreconciliables. Por ello que se ha llegado a un texto que prioriza la protección del medio ambiente y la salud de las personas, además de la libertad de creación de empresas y libre circulación de mercancías, dentro de un respeto a las distribución de competencias», ha manifestado.

Con este proyecto de ley se pretende trasponer al régimen normativo español la Directiva Marco de Residuos europea que, entre otros aspectos, establece un calendario de sustitución de bolsas comerciales de un solo uso, de forma que antes de 2013 se sustituyan el 60 por ciento de las mismas, para 2015 el 70 por ciento, para 2016 el 80 por ciento, para finalmente suprimirlas por otras biodegradables de forma definitiva para 2018.

La nueva ley eliminará progresivamente las bolsas de plástico Foto: ecologiablog

Para defender la enmienda presentada por ERC-IU-ICV, Nuria Buenaventura ha argumentado que el proyecto del Gobierno adolece de aspectos «cruciales» para avanzar hacia el objetivo de la «sociedad del reciclaje». Sin embargo, considera «necesario» vincular este proyecto con las estrategias de lucha contra el cambio climático y con la creación de una fiscalidad que promueva la prevención y la no generación de residuos.

«Echamos en falta una apuesta clara para el tratamiento y la recogida de biorresiduos, además de una falta de ambición en el sistema impuesto los sistemas de depósito, devolución y retorno. Nos gustaría un mayor compromiso del Gobierno», ha reclamado la diputada ecosocialista.

Desde el PP, Carlos Floriano, ha señalado que han propuesto el rechazo y la devolución del texto presentado por el Ejecutivo porque «va más allá» de la directiva que debe transponer esta futura normativa, sin que se aporten mejoras ambientales, y contradiciendo en ocasiones lo establecido en las normas comunitarias en varios, aspectos como el mercado interior o de servicios.

Es más, indica que el texto propuesto es «excesivamente intervencionista» para los propios sistemas instaurados desde hace más de una década y para el resto de administraciones, «invadiendo las competencias autonómicas», sin que se asegure la creación de un sistema de gestión de los residuos mejor que el que ya existe. Eso sí, considera que este proyecto de ley no proporciona una solución a las dificultades originadas en la gestión de los residuos, impone la constitución de una figura jurídica concreta, a la que habrán de ajustarse los actuales sistemas de gestión limitando.

«Sería bueno señora ministra que le echase una repensada a la transposición de la directiva europea que hace en el proyecto de ley para responder a las verdaderas necesidades sociales, medioambientales y económicas», ha agregado.

INTERFERENCIAS CON LAS COMPETENCIAS AUTONÓMICAS

Por su parte, Olaia Fernández Dávila, del BNG, ha mostrado su conformidad con algunas de las cuestiones planteadas, especialmente con ERC-IU-ICV en la necesidad de insistir en la prevención, reutilización y reciclaje; y en el caso del PP, concuerda en que este proyecto de ley interfiere en las competencias autonómicas y locales.

Joseba Agirretxea, del PNV, ha considerado que este proyecto no es susceptible de ser retirado ni merecedor de una enmienda a la totalidad. Es más, apunta que una ley «siempre es mejorable en el trámite de enmiendas parciales» y que detrás de las presentadas para la devolución del texto al Gobierno hay intereses políticos o medioambientales.

El diputado de CiU, Carles Campuzano, ha comentado que sí existen puntos a mejorar pero no se justifica la devolución del texto del Gobierno.

En cambio, en cuanto a la enmienda a la totalidad del PP, Morán ha argumentado que las comunidades autónomas han dado su visto bueno al ámbito competencial. «Entendemos que es posible alcanzar un encuentro razonable en la tramitación de la ley, invitamos al PP a tener un ámbito de encuentro sin límite», ha agregado.

Fuente: http://www.europapress.es/