Más de 350 pymes ya han participado en Pyme Energy Check Up, un proyecto europeo cuyo objetivo es mejorar la eficiencia energética de bares, restaurantes, comercios, negocios de alojamiento y oficinas. Cofinanciado por la Unión Europea (UE) a través del programa Intelligent Energy-Europe, la iniciativa está coordinada en España por el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio y el Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE). El proyecto ofrece una calculadora energética para que estos negocios conozcan cómo y cuánto pueden ahorrar en su factura energética. El plazo para obtener un informe personalizado y gratuito a través de la web del proyecto está abierto hasta el 31 de marzo.

Más de 350 pymes ya se han beneficiado de un informe personalizado y gratuito sobre su consumo energético en el proyecto Pyme Energy Check Up, en el que todavía es posible participar hasta el 31 de marzo.

Los negocios obtienen un diagnóstico con las principales medidas a implantar, su coste aproximado, los ahorros potenciales a conseguir y el tiempo estimado para recuperar la inversión. El siguiente paso es la implantación de medidas de ahorro: los usuarios de la herramienta pueden solicitar presupuesto a un centenar de proveedores especializados que han sido homologados por el proyecto. Además, a través de dicha web, disponen de información, recursos y vídeos explicativos sobre ahorro energético que les ayudará en la toma de decisiones a la hora de implantar medidas. En el marco del proyecto también se han realizado 20 revisiones energéticas gratuitas por parte de expertos del CIRCE.

Bares, restaurantes, comercios, negocios de alojamiento y oficinas disponen de un catálogo de medidas de ahorro energético que pueden implantar. Las medidas se ofrecen de forma personalizada en los informes y se dirigen a mejorar la eficiencia en iluminación, climatización, consumo de agua, así como acciones específicas de aislamiento en paredes, fachadas o ventanas de los edificios.

Conocer dónde se consume más energía ayuda a ahorrar

Los informes generados a través de este proyecto europeo han revelado algunas cuestiones que afectan al consumo energético de este tipo de establecimientos. Por ejemplo, la gran mayoría de pymes tiene contratado un exceso de potencia energética en relación a las necesidades reales de consumo de su negocio.

Cada establecimiento tiene sus propias particularidades, pero existen patrones de consumo energético comunes a cada sector. En los pequeños comercios, por ejemplo, la iluminación puede suponer más del 50% del gasto energético y la calefacción/aire acondicionado, otro 35%. En bares y restaurantes, el consumo eléctrico supone el 80% de toda la energía consumida, centrado principalmente en la cocina.

En negocios de alojamiento turístico, aproximadamente el 25% del consumo total proviene de la producción de agua caliente sanitaria, seguido por refrigeración y calefacción. En las oficinas, sin embargo, la climatización representa casi la mitad del gasto, siendo también notables los consumos en iluminación y equipos informáticos.

Aplicar medidas en este tipo de equipamientos supondrá ahorros considerables en la factura energética.

Fuente: https://www.eseficiencia.es/