El papel de las ciudades en la lucha contra el cambio climático y la sostenibilidad del medio ambiente urbano es determinante teniendo en cuenta que la mitad de los contaminantes atmosféricos y gasto energético se produce en los núcleos urbanos.
El Libro pone de manifiesto que los beneficios que se obtienen con el desarrollo inteligente son mucho mayores que las inversiones necesarias para su implementación, especialmente en un entorno de crisis, en el que la multitud de los sectores implicados en una economía Smart City permitirán generar valor a la ciudad y transformarla en una economía sostenible.
¿cómo avanzamos hacia la Smart City? Pues pasito a pasito. El próximo jueves 24 a las 22 horas hablaremos de algunas cosas que podemos hacer ya… algunas no muy legales a simple vista.
Investigadores del Instituto de Tecnología Massachussets y Ferrovial Servicios han seleccionado a Málaga para implantar un proyecto piloto mundial en ahorro energético por el que esta ciudad se convierte en laboratorio urbano para optimizar la gestión energética de las ciudades inteligentes.
Instituto Superior del Medio Ambiente, ISM