La NASA anunció el lanzamiento del satélite Aquarius el próximo 9 de junio, encargado de estudiar los niveles de salinidad de los océanos y su influencia en los cambios climáticos.

‘Aquarius trazará un mapa de las variaciones globales de salinidad a un detalle sin precedentes, llevando a nuevos descubrimientos que mejorarán nuestra capacidad para predecir el clima del futuro’, dijo Gary Lagerloef, director de Investigaciones del satélite.

En un comunicado, la NASA informó de que los ingenieros están realizando en la base aérea Vanderberg de California las últimas pruebas antes de acoplar el Aquarius/SAC-D al cohete Delta II que lo colocará en órbita.

El Aquarius será el primer satélite dedicado a ofrecer observaciones acerca de la concentración de sal disuelta en los océanos.

‘Las observaciones del Aquarius revelarán cómo las variaciones de salinidad influyen las corrientes oceánicas, trazan el recorrido del agua dulce a través del planeta y ayudan a moldear el clima de la tierra’, explicó la NASA. Aquarius mejorará en gran medida la cantidad de mediciones de salinidad de los océanos que han sido recogidas por los buques, boyas y flotadores.

La Nasa lanzará un satélite para medir la salinidad oceánica

«Cuando se combinen datos de otros sensores que miden el nivel del mar, el color del océano, la temperatura, vientos, precipitaciones y evaporación, con los de Aquarius, los datos de salinidad mundial darán a los científicos una visión mucho más clara de cómo funciona el océano, su relación con el clima y cómo pueden responder al cambio climático», dijo Lagerloef.

El satélite ofrecerá detalles de los océanos cada siete días durante 3 años desde una distancia de 657 kilómetros, y mostrará los flujos de salinidad en el tiempo y entre las diversas partes de los océanos.

‘La salinidad es el pegamento que vincula dos componentes básicos del complejo sistema del clima: las corrientes oceánicas y el ciclo global del agua’, agregó Gary Lagerloef.

Según la NASA, la superficie de los océanos intercambia agua y calor constantemente con la atmósfera, y el 80 por ciento del ciclo global del agua que mueve agua dulce de los océanos a la atmósfera y a la tierra y posteriormente de vuelta al océano se produce sobre la superficie de éstos.

Además, el Aquarius llevará otros instrumentos para recoger información medioambiental sobre desastres naturales midiendo la humedad del suelo a gran escala para realizar alerta temprana de inundaciones, calidad del aire, epidemiología y procesos geológicos. Los estudios mejorarán los modelos informáticos utilizados para predecir  eventos climáticos de corto plazo, tales como El Niño y La Niña.

El satélite incluye dos radiómetros y un escarómetro que operan en el rango de las microondas a diferencia de los satélites que solo incluyen instrumental óptico para imágenes en rayos de luz visible e infrarroja

La misión es fruto de la colaboración entre la Agencia Espacial de EEUU y la Agencia Espacial Argentina (CONAE), y cuenta con la participación de Brasil, Canadá, Francia e Italia.

Fuentes: http://www.vistaalmar.es/ y http://www.efe.com/