La reutilización indirecta del agua es un hecho a lo largo de todo el mundo, aunque se haga de forma inconsciente, ya que las aguas tratadas por una depuradora y vertidas a un curso natural son posteriormente utilizadas por otro usuario aguas abajo.

Por otra parte, la reutilización directa del agua es una práctica cada vez más empleada internacionalmente y muy extendida en España, país mediterráneo con alta variabilidad de la disponibilidad y con balance hídrico deficitario. En este caso, la reutilización supone un aumento de la disponibilidad del recurso en las zonas costeras donde el agua depurada es vertida al mar, y permite la sustitución de agua regenerada por agua prepotable, dejando esta última para usos que requieran agua de mayor calidad y evitando el vertido de agua depurada al río con las implicaciones ambientales que ello conlleva.

La reutilización de agua es sinónimo de seguridad puesto que el recurso procede de una estación de regeneradora de aguas, que en la mayoría de los casos se encuentra dentro de la estación depuradora de aguas residuales, y esto supone que la materia prima (agua depurada) es constante, exceptuando variabilidades diarias y estacionales, y por tanto no dependiente de la climatología, y está escrupulosamente controlada desde el punto de vista de calidad.

Precisamente, con objeto de regular la calidad y establecer el régimen jurídico de las aguas regenerada, en noviembre de 2007, el por entonces Ministerio de Medio Ambiente publica el Real Decreto 1620/2007, siendo una norma pionera a nivel mundial. Dicha norma aclara varios conceptos relativos a la reutilización del agua hasta entonces empleados indistintamente, fija los usos permitidos (urbanos, agrícolas, recreativos, industriales y ambientales) y los prohibidos, entre los que destaca el consumo humano, normaliza los procedimientos administrativos para la obtención del derecho al uso y establece los parámetros de calidad y valores máximos permitidos para cada uso, determinando asimismo el régimen de control y responsabilidades en relación al mantenimiento de la calidad.

Desde el punto de vista de la gestión, el uso de agua regenerada ha sido contemplado y promovido por los diferentes estamentos públicos desde ordenanzas municipales, como es el caso de Madrid o Lanzarote, planes de gestión autonómicos o el Plan Nacional de Reutilización de Aguas impulsado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente con el cual se pretende alcanzar la reutilización de 1.130 hm3 de agua depurada en el siguiente ciclo de planificación al que ahora nos encontramos que concluye en 2015.

Todos estos años de gestión, normalización y práctica de la reutilización de aguas en España se han traducido en numerosas experiencias exitosas para cada uno de los diferentes usos permitidos por el Real Decreto 1620/2007.

Cartel en S. Martín de Valdeiglesias, Madrid. http://sanmartincongafas.blogspot.com.es

El agua regenerada es empleada para usos urbanos -riego de jardines y baldeo de calles principalmente- en muchas ciudades de España. En este apartado resaltan casos como el de las dos ciudades más grandes de España, Madrid y Barcelona, en los que se ha incorporado la reutilización de agua en el ciclo integral para equilibrar sus balances hídricos. En el primer caso, instalando una red municipal de distribución de agua regenerada de 141 kms de longitud y 36 depósitos con la que se suministran 6 hm3/año con una inversión de 132 millones de euros. En el segundo caso, supone la reducción del 15% del uso de agua potable con una inversión de 9 millones de euros en el período 2007-20011 y una previsión de casi 5 millones de euros en 2012-2015 con una potencialidad de 2,6 hm3 de la depuradora del Prat de Llobregat.

Al igual que ocurre con el agua prepotable, el uso mayoritario de agua regenerada es el agrícola con más del 70% del volumen total empleado. En este caso los beneficios son notables puesto que en muchos casos el uso requiere calidad de agua menos exigente y el agua regenerada puede llevar incorporada nutrientes beneficiosos para la tierra de cultivo. La región de Murcia representa un caso ejemplar con 53 estaciones depuradoras con tratamiento de regeneración que tratan un caudal de 55 hm3/año y costes no superiores a los 8 céntimos de euro por metro cúbico.

El uso industrial en España está representado por la industria papelera Holmen Papper en la Comunidad de Madrid. Mediante un acuerdo con el Canal de Isabel II en el año 2011, Holmen Papper puede reutilizar 10.500 m3/dia (3,8 hm3/año) para fabricar papel reciclado con agua regenerada mediante tecnología de membranas y desinfección.

Por su parte, el uso recreativo está principalmente ligado al riego de campos de golf, obligado en algunos casos por las normativas autonómicas, aunque también se contemplan los usos ornamentales. El empleo de agua regenerada en los campos de golf contribuye a la sostenibilidad de esta actividad junto con el uso de variedades cespitosas con menores requerimientos hídricos e instalación de sistemas inteligentes de riego con niveles de eficiencia muy elevados.

El uso ambiental del agua regenerada tiene numerosos y sobresalientes ejemplos en España como son: la recuperación del Parque Natural de la Albufera de Valencia desde las plantas de tratamiento de Pinedo, Sueca y Albufera Sur con un caudal de 155 hm3/año y una inversión de 175 millones de euros; la recarga de acuíferos mediante inyección de agua regenerada en Cataluña, con una previsión de 42 hm3/año en 2015; el freno de la barrera de intrusión salina en el Llobregat mediante una sistema con capacidad para producir 15.000 m3/dia y una red de tuberías de más de 7 kilómetros, con una inversión asociada de 23 millones de euros; el suministro al Parque Natural de Aiguamolls de l’Empordà en la Costa Brava.

Resultado de la amplia experiencia obtenida por los diferentes actores involucrados en la reutilización de agua en España, las tecnologías para la regeneración de aguas depuradas y las prácticas para el mantenimiento de la calidad del agua regenerada en el transporte hasta el punto de uso se han desarrollado y perfeccionado de forma prodigiosa, con un considerable aumento del rendimiento y una reducción de costes que permite a este recurso competir de igual a igual con otras alternativas.

Todo ello se hace imposible sin la constante investigación, desarrollo e innovación de las empresas y Administraciones Públicas del sector del agua en España, que cuenta con instituciones de referencia como el Centro de Nuevas Tecnologías del Agua (CENTA) donde comprueban la efectividad de diferentes tratamientos y aplicaciones, desarrollan proyectos punteros como “Reutilización de aguas depuradas para usos ambientales: recarga de acuíferos mediante barreras reactivas y silvicultura con fines energéticos” y cuentan con líneas de investigación innovadoras como “Análisis y determinación de nematodos fitoparásitos y bacteriófagos en las aguas reutilizadas” o “Modificación de técnicas analíticas para determinación y conteo de huevos de helmintos intestinales”

La posición líder de España en la gestión y tecnologías del agua y, más en concreto, de la reutilización de aguas depuradas fue abordada en la Sesión Técnica del Congreso Nacional de Medio Ambiente 2012: “ST-1 Reutilización del agua: la tecnología española, garantía de calidad y seguridad”.

Post publicado originalmente en iagua.

David Escobar colabora con el Instituto Superior del Medio Ambiente como docente de los cursos Tratamiento y Depuración de Aguas y Planificación Hidrológica y la GIRH.