La huelga de limpieza viaria en Madrid encara su segunda semana, ¿pero cuáles son los orígenes de este conflicto?:

En Abril del 2013 el Ayuntamiento de Madrid licitó la prestación de servicios de Limpieza viaria, conservación de espacios públicos y conservación de zonas verdes de la ciudad de Madrid.

En esta licitación el Ayuntamiento acertó en dos aspectos:

1.-Unifica la prestación de servicios, en el mismo contrato van entre otros servicios la limpieza de las calles, el mantenimiento del arbolado urbano y los servicios de riego y abastecimiento de agua. Es pura lógica unificar en un único contrato lo que antes estaba en 39.  Al agruparlos se logran sinergias y economías de escala.

2.-La licitación sale con una rebaja del 10 % sobre los contratos anteriores, algo a todas luces necesario ya que el presupuesto total del Ayuntamiento se reduce en una cantidad similar.

Pero comete un tremendo error: el pliego no obliga a que la prestación esté realizada con un número mínimo de trabajadores. Se fijan unos criterios de calidad y el Ayuntamiento controlará que se cumplan, pero no dice con cuántos trabajadores hay que hacerlo.

En la licitación se divide la ciudad en seis sectores o lotes y las empresas pueden optar a adjudicarse un máximo de 3 lotes cada una.

Acceden al concurso las principales empresas del sector de servicios urbanos (todas ellas filiales de las principales constructoras del país): Cespa, FCC, Urbaser, Valoriza, Acciona y en menor medida OHL en UTE con una empresa menor de recogida de residuos: ASCAN.

El Julio se adjudicaron las zonas a: FCC (2 zonas), CESPA, Valoriza (2) y OHL- ASCAN.

Y aquí empiezan los  problemas, al no fijar un número mínimo de trabajadores las empresas presentan unas ofertas muy por debajo de la licitación. Las rebajas oscilan entre el 12 y el 22% de tal forma que el presupuesto es un 25 % menor que los años anteriores.

Para los vecinos de Madrid podría ser una gran noticia: pensaremos que se va a realizar el servicio con un coste del 25 % menos y que eso repercutirá en nuestros bolsillos a modo de rebaja de impuestos. Por el contrario, el Ayuntamiento de Madrid anunció la semana pasada que vuelve a subir el IBI alrededor de un 7 % de media para los próximos años.

Pero los madrileños no sólo vamos a pagar más impuestos los próximos años sino que tenemos ahora mismo un conflicto de difícil solución: es imposible prestar de forma correcta el servicio de limpieza en las condiciones que se ha ofertado.

El conflicto era de esperar: la prestación de la limpieza viaria es un servicio muy intensivo en mano de obra, casi el 75 % de los costes son de personal. Si el contrato era por un 25 % menos lo primero que han abordado las empresas concesionarias es reducir en el mismo porcentaje en personal. Han presentado un ERE del 25% de la plantilla que prestaba los diferentes servicios anteriores.

Y ha estallado el conflicto:

Imagen de una calle de Madrid. Fuente: 20 Minutos

La solución al problema tiene que pasar por repartir el 25 % de la reducción del contrato entre todas las partes involucradas:

El Ayuntamiento de Madrid tiene que dar marcha atrás y adjudicar los contratos con un máximo del 15 % de rebaja sobre el coste de años anteriores.

Los sindicatos tienen que darse cuenta que de ese 15% tienen que asumir un 10% bien en despidos, bien en rebajas salariales.

Las empresas concesionarias tendrán que hacerse cargo del 5 % restante, tendrán que realizar una mejor gestión que permita aprovechar las economías de escala del contrato unificado, tendrán que asumir alguna vez un menor beneficio en este tipo de servicios y tendrán que valorar que para alguna de ellas un contrato en Madrid le servirá como puerta de entrada a optar a contratos de servicios urbanos en las principales ciudades del mundo.

Una última apreciación, el responsable por parte del Ayuntamiento no puede ser Diego Sanjuanbenito (delegado de Medio Ambiente del Ayuntamiento), este chico de 34 años ha pasado de  las NNGG del PP a hacerse cargo de un presupuesto de 2.000 millones de euros.