Madrid, ha contado siempre con un buen suministro de agua durante todo el año gracias a los llamados ‘Viajes de Agua’ o lo que es lo mismo conducciones subterráneas que transportaban el agua desde zonas donde abundaba hasta la misma ciudad. Se trataba de obtener agua y conducirla a otros lugares. La captación del líquido se realizaba tomando como base pozos construidos en las cercanías de arroyos altos.

Este conjunto de pozos era unido entre sí por medio de una red de galerías que a la vez que trasladaban el agua, hacían labores de captación.

Vídeo realizado por la Fundación IMDEA Agua.