El viento que producen los trenes de metro a su paso podrá utilizarse para generar electricidad gracias a unos aerogeneradores de subsuelo de la compañía Tunel Energy.

El fundador de la empresa, Francisco Martínez Bugarín, explica que la ventaja sobre la energía eólica convencional es que con ésta «no pueden controlar el viento», mientras que, con su aerogenerador, «sí sabemos cuándo va a haber viento para moverlo».

«Los aerogeneradores grandes odian las turbulencias, mientras que el nuestro vive de ellas», ha aseverado.

Asimismo, al estar diseñados para ser instalados en estructuras urbanas, se eliminarían las líneas de transmisión desde los parques eólicos hasta las ciudades.

Martínez ha señalado que estos parques necesitan de una obra extensa, mientras que sus aerogeneradores, «casi planos y con un reducido tamaño de 10 centímetros como máximo», tendrían un coste de instalación «muy reducido» y sería «muy sencillo» implementarlos.

Tunel Energy firmó el pasado 15 de febrero un convenio de colaboración con Metro de Madrid para poner en marcha el proyecto, lo que para Martínez supone «un apoyo muy claro» que además servirá para obtener datos de los túneles.

«Vamos a medir la velocidad media de los vientos o las frecuencias de paso durante algo más de un mes para conseguir una información que hasta ahora nos faltaba», ha afirmado.

De todos modos, el fundador de la compañía ha puntualizado que el proyecto durará «casi dos años» debido a que aún tienen que desarrollar el prototipo y llevar a cabo las pruebas necesarias, que también se realizarán en la red de metro de la capital española.

Tunel Energy afirma que si se instalaran 100.000 de sus aerogeneradores en un tramo como el que transcurre entre las estaciones de Alonso Martínez y Gregorio Marañón, «solo en las horas punta se generarían 250 kilovatios al día, el consumo de 25 hogares en un año».

Los planes de Tunel Energy pasarían por instalar sus aerogeneradores en líneas «más modernas» como la 8 o la 10, según Martínez, mientras que en las más anticuadas, como la 1 o la 2, no sería posible.

En cuanto al uso de esta energía, Martínez señala que «serviría para el autoabastecimiento de los andenes», aunque podría destinarse a cualquier uso.

De cara al futuro, Martínez cree que hay posibilidades «muy grandes» de internacionalizar el proyecto, y señala que ya se encuentran «en conversaciones básicas» con otra empresa que gestiona túneles de circunvalaciones para llevar a cabo pruebas de medición.

«Si tiene la misma rentabilidad que la eólica hay muchas posibilidades de comercializarlo», ha dicho.

La iniciativa de Martínez fue una de las ganadoras del I Premio Madrid Subterra, un concurso de ideas para la explotación y exploración de la energía en el subsuelo urbano celebrado el pasado diciembre.

Fuente: Expansión