El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), a través de la Confederación Hidrográfica del Ebro, ha sacado a información pública el proyecto de construcción del embalse de Mularroya, en los términos municipales de La Almunia de Doña Godina, Chodes y Ricla (Zaragoza), así como las actuaciones complementarias y el nuevo estudio de impacto ambiental, según se publicó en BOE.

Este embalse responde a los compromisos adquiridos por el Ministerio con los acuerdos de la Comisión del Agua de Aragón sobre las principales obras del Pacto del Agua, entre ellas la regulación del río Grío y los caudales de la Cuenca del Jalón.

El nuevo procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental y DIA subsana las deficiencias de protección ambiental detectadas por el Tribunal Supremo, que fundamentaron la sentencia que anulaba las resoluciones aprobatorias del anterior Estudio de Impacto Ambiental y, por tanto, del anteproyecto y proyecto.

Una vez superada la fase de exposición pública el nuevo proyecto y la Declaración de Impacto Ambiental podrían aprobarse de forma definitiva, a principios de 2014, lo que permitirá continuar con el contrato de ejecución de la obra, paralizada desde el mes de marzo de forma cautelar por el Ministerio tras conocer la sentencia del Tribunal Supremo que declaraba insuficientes las medidas medioambientales previstas.

Zona de construcción del embalse. Imagen: arainfo

Medidas correctoras reforzadas

Unas medidas correctoras que se han reforzado en el nuevo estudio de impacto ambiental que el Organismo de cuenca empezó a elaborar en marzo de 2012, un año antes de hacerse pública la sentencia para asegurar que la obra cumplía todos los requisitos medioambientales. En cuanto a la petición realizada ante la Audiencia Nacional para continuar los trabajos hasta la cota 454,5 se sigue a la espera de la resolución del Tribunal.

El nuevo embalse junto conla presa, el azud de derivación en el río Jalón y el túnel de conducción constituirán el sistema de regulación del Bajo Jalón que permitirá el riego de los terrenos de la zona, además de garantizar el abastecimiento a sus poblaciones, la demanda industrial y el caudal ecológico de los ríos Jalón y Grío.

En la actualidad, los volúmenes de agua necesarios para las concesiones en funcionamiento, superan el volumen de recursos regulados en años medios en el río Jalón y en su afluente, el río Jiloca, lo que justifica la actuación.

Los documentos que han salido a Información Pública, para que todos aquellos interesados puedan presentar alegaciones, son tanto el proyecto de construcción del embalse de Mularroya como el proyecto de Obras Complementarias nº1, así como los anteproyectos de desvíos parciales del Oleoducto Rota-Zaragoza (tramo Ariza-La Muela) y de la línea eléctrica Magallón-Terrer/Medinacelli-Rueda de Jalón, además del estudio de impacto ambiental de las cuatro actuaciones.

Datos técnicos

La presa, situada en el valle del río Grío en los términos municipales de Morata de Jalón, La Almunia, Chodes y Ricla, se construirá con materiales sueltos y tendrá un volumen de 103,3 hm³, una altura sobre cimientos de 82,58 metros y ocupará una superficie de embalse de 463 hectáreas.

El azud, ubicado en el río Jalón, aguas arriba de la pedanía de Embid de la Ribera (Calatayud); afecta a una superficie de 21,68 hectáreas y está construido en hormigón, con 133,55 metros de longitud y dotado de una escala para peces.

La conexión entre el río Jalón y el río Grío se realizará con un túnel de 12,816 kilómetros de longitud y 2,90 metros de ancho, que desaguará en la cola del embalse hasta un caudal máximo de 8 m³/segundo.

El proyecto de construcción de la presa de Mularroya incluye también una variante de carretera de 7,1 kilómetros de longitud para reponer los tramos que inundará de las carreteras N-IIa y A-2302.

En cuanto al proyecto de Obras Complementarias nº1, comprende la reposición de otros servicios (telefonía, accesos a fincas, conexiones de riego y eléctricas); tratamientos de taludes; la instalación de una pantalla de impermeabilización de una zona del vaso; el alumbrado panorámico de la presa y de los accesos y una compuerta adicional en la toma derecha.

Por motivos medioambientales, se procederá también a la descontaminación de los suelos de la gasolinera; se habilitará un parque junto a la variante, un mirador en el estribo izquierdo y un dique “anticontaminación” junto al vertedero de Morata de Jalón y se realizará una repoblación forestal en la zona expropiada.

Por último, se someten también en el mismo procedimiento de EIA, dos anteproyectos: el del desvío del Oleoducto Rota-Zaragoza, que prevé la construcción de una variante de 14 kilómetros de longitud dentro del tramo Ariza-La Muela y el del desvío de línea eléctrica de REE en un pequeño tramo de su trazado actual sobre el embalse.

EIA

La nueva evaluación ambiental es fruto del trabajo de un equipo multidisciplinar constituido por biólogos, ambientólogos y químicos de la Cátedra de Medio Ambiente de la Universidad de Alcalá, que han revisado y muestreado durante los últimos tres años todas las zonas afectadas por el proyecto.

Durante este tiempo, han estimado con las técnicas más modernas, el impacto que el proyecto puede causar sobre la flora, la vegetación, la fauna, los espacios protegidos y la red hidrológica.

Así, tras evaluar, además de las 659 hectáreas afectadas por las obras, otras 15.000 para comparar con el entorno y obtener una visión completa de la afección sobre el medio, las medidas correctoras que se proponen, además de garantizar que el proyecto no pone en riesgo la integridad de los valores naturales de la zona, son de amplio calado y muchas de ellas, innovadoras.

En concreto, se propone el rescate y reproducción de la flora de interés de las zonas a inundar; la mejora del hábitat de los peces autóctonos; la creación de nuevos refugios de quirópteros (murciélagos); la mejora de la situación de las grandes rapaces; varias medidas de seguimiento y mejora del conjunto de las especies rupícolas y riparias y un trabajo de restauración vegetal de gran amplitud, con formaciones con mayor representación y calidad.

También se plantea un plan de vigilancia muy ambicioso, con medidas mensuales de calidad de agua, control de procesos de desbroce y tala, seguimiento de medidas correctoras y un control exhaustivo de las incidencias de las obras.

Estudios de Fauna y Flora

Para la determinación de estas medidas correctoras se han elaborado complejos estudios de toda la vegetación del área y de la fauna con especial hincapié en medidas sobre el águila perdicera, la madrilla, la nutria, los quirópteros y las especies rupícolas.

En cuanto a los espacios protegidos, la obra afecta a un 0,6% del LIC Hoces de Jalón y un 2,14% de la ZEPA Desfiladeros del Jalón, se considera que el proyecto no afecta significativamente a los objetivos de conservación de estos espacios y se proponen numerosas medidas que permiten evitar los mayores impactos sobre estas zonas.

Fuente: MAGRAMA