Según datos publicados por la Agencia Europea de Medio Ambiente, la proporción de aguas residuales urbanas que se recogen y tratan de acuerdo con las normas de la UE está aumentando en toda Europa.

En toda la UE, aproximadamente el 90% de las aguas residuales urbanas se recogen y tratan de acuerdo con la Directiva de tratamiento de aguas residuales de la UE.

Los nuevos perfiles de países de la AEMA sobre el tratamiento de aguas residuales urbanas presentan los datos más recientes de los 27 Estados miembros de la UE e Islandia y Noruega sobre la implementación de la Directiva de tratamiento de aguas residuales urbanas de la UE.

Los perfiles de países contienen mapas interactivos con plantas de tratamiento de aguas residuales en toda Europa. Cada perfil también muestra datos sobre el progreso del país hacia los objetivos de tratamiento de aguas residuales, protección de sistemas de agua sensibles, uso de lodos de aguas residuales y emisiones de gases de efecto invernadero del sector de tratamiento de aguas residuales.

Los datos muestran que la recogida y el tratamiento de aguas residuales están mejorando en toda Europa. En toda la UE, aproximadamente el 90% de las aguas residuales urbanas se recogen y tratan de acuerdo con la Directiva de tratamiento de aguas residuales de la UE.

Según los perfiles de los países, cuatro países (Austria, Alemania, Luxemburgo y los Países Bajos) tratan el 100% de sus aguas residuales urbanas de conformidad con los requisitos de la Directiva, mientras que otros 10 países han alcanzado una tasa de cumplimiento superior al 90%. En el otro extremo de la escala se encuentran cinco países (Irlanda, Bulgaria, Rumania, Hungría y Malta) que cumplen con los mismos estándares en menos de la mitad de sus áreas urbanas.

Trasfondo

Las aguas residuales urbanas deben tratarse adecuadamente porque pueden contener bacterias, virus, nitrógeno, fósforo y otros contaminantes que pueden suponer un riesgo para el medio ambiente y la salud humana.

La Directiva de la UE sobre aguas residuales urbanas establece un plan de tiempo para la construcción de infraestructura para la recolección y tratamiento de aguas residuales en áreas urbanas. En general, las aguas residuales deben someterse a un tratamiento biológico (“tratamiento secundario”), que elimina una proporción muy alta de contaminación orgánica, bacterias y virus. Para reducir el riesgo de proliferación de algas, se requiere una mayor eliminación de nitrógeno y / o fósforo en áreas urbanas más grandes que están conectadas a cuerpos de agua sensibles.

Los nuevos perfiles de países se publican en la plataforma Agua dulce del Sistema de información sobre el agua para Europa (WISE), que se está convirtiendo en un punto de entrada único para acceder a datos e información sobre el estado medioambiental y las evaluaciones de políticas del agua dulce europea.

Fuente: Retema