El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural, ha concluido las obras de corrección de tendidos eléctricos peligrosos para aves amenazadas en la Región de Murcia.

La obra, financiada por el Ministerio y cofinanciada por el fondo FEDER, se ha desarrollado en el marco del convenio de colaboración entre el Ministerio y la Región de Murcia para la ejecución y coordinación de actuaciones en materia de protección del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, suscrito el pasado abril. El convenio cuenta con una inversión del Ministerio superior a 8 millones de euros, según han informado fuentes ministeriales.

Las actuaciones se localizaron dentro de 18 Zonas Especiales de Protección de Aves (ZEPA), pertenecientes a la Red Natura 2000. Se ha actuado preferentemente en áreas que tienen una importante presencia de aves rapaces en las que se habían detectado muertes por electrocución en postes y centros de trasformación eléctrica. La mejora del aislamiento de los postes eléctricos y de centros de transformación en el exterior han demostrado su efectividad en la recuperación de las poblaciones de rapaces, de anátidas y otras especies de aves de gran tamaño, por lo que su desarrollo en aquellas líneas antiguas tiene un especial interés en la conservación de la biodiversidad. Las actuaciones han supuesto una inversión superior a 1,5 millones de euros por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Corrección tendidos eléctricos http://www.murcianatural.carm.es/

Reivindicación ecologista

La mejora de la red de tendido eléctrico para evitar la muerte de aves amenazadas es una reivindicación permanente de organizaciones como Ecologistas en Acción. Cada año, cerca de un centenar de aves rapaces, muchas de ellas en peligro de extinción y protegidas, mueren electrocutadas en la Región o, en el mejor de los casos, sufren la amputación de un ala. Estos accidentes provocan además averías en el tendido eléctrico.

Los postes de la luz son lugares muy tentadores para las aves. Ajenas al peligro, acuden a ellas como un buen sitio para avistar presas, o simplemente para descansar. Pero en cualquier momento, si el animal toca a la vez dos cables o un cable y el propio poste, se produce una derivación de corriente eléctrica a través de su cuerpo que hace que muera electrocutado al instante.

Fuente: http://www.laverdad.es/