El ahorro y eficiencia energética, el desarrollo de herramientas relacionadas con el cálculo de huella de carbono o la movilidad sostenible son según el director de programas del Instituto Superior del Medio Ambiente (ISM), Santiago Molina, algunos de los ámbitos «en los que más fácilmente se puede emprender en este campo sin necesidad de hacer frente a grandes inversiones.»

¿Te afecta a tí?

Precisamente, la ONU, que ayer celebró la cuadragésima edición del Día Mundial del Medio Ambiente bajo el lema «Economía verde, ¿te incluye a ti?«, ha destacado la relevancia de las pequeñas empresas para impulsar un desarrollo socioeconómico respetuoso con el entorno.

En estas actividades se engloban desde aquellas que reducen las emisiones de gases de efecto invernadero o el consumo de energía y recursos naturales, a las que ayudan a conservar la biodiversidad y en los últimos años se han presentado más de 200 proyectos en España.

El informe de Economía Verde del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) señala que, con invertir solamente un 2% del PIB mundial en diez sectores claves (agricultura, construcción, energía, pesca, gestión forestal, industria, turismo, transporte, residuos y agua), se puede activar una transición hacia una economía baja en carbono y eficiente en el uso de recursos.

A nivel mundial, el PNUMA puso en marcha en 2002 la iniciativa «SEED» para premiar a pequeños empresarios de países en desarrollo con ideas innovadoras de carácter local que luchan contra la pobreza y contribuyen al uso sostenible de los recursos naturales: algunos proyectos premiados han sido una empresa que fabrica bicicletas de bambú en Ghana o una franquicia de cargadores de energía solar en áreas remotas de Burkina Faso.

Papel protagonista

Los emprendedores verdes jugarán «un papel protagonista» en esa transición ha destacado a EFEverde la directora de la Fundación Biodiversidad, Sonia Castañeda. Por eso esta Fundación pública creó hace algo más de un año la «Red Emprendeverde«, una plataforma online que busca poner en contacto a emprendedores y a inversores, en la que ya hay registrados 2.439 usuarios.

200 proyectos

Castañeda ha explicado que la Red está preparando «un concurso para reconocer y premiar a estos protagonistas de la economía verde», estos emprendedores que han presentado más de 200 proyectos de negocios ambientalmente sostenibles.

Entre las trabas para «emprender en verde», además de la financiación esta los complejos trámites administrativos que, según Castañeda nos hacen «uno de los países de la OCDE más lentos para montar un negocio».

Según Castañeda, la economía verde «es una oportunidad que nos brinda la crisis», algo en lo que coincide Santiago Molina, director de programas del Instituto Superior del Medio Ambiente (ISM), un centro de formación que enseña a poner en marcha un negocio ambiental.

Desayuno de trabajo de emprendedores del sector ambiental en el Instituto Superior del Medio Ambiente. ISM

Al ISM se acercan sobre todo profesionales como físicos o licenciados en Ciencias Ambientales «con una trayectoria de entre 2 y 4 años en el sector y mucha inquietud» que han identificado oportunidades de negocio, resalta Molina.

Talento verde

Uno de los «ecoemprendedores» que pasó por las aulas del ISM antes de montar su negocio es Agustín Valentín-Gamazo, el director de Enviroo, un portal de empleo y medio ambiente que busca impulsar el «talento verde» y facilitar a las empresas perfiles de profesionales del sector ambiental.

Según Valentín-Gamazo, es «una forma de unir nuevas tecnologías, medio ambiente y emprendimiento»; una plataforma necesaria en España, un país con «mucho potencial» en este sector.

«Se trata de buscar el talento verde a través de servicios más innovadores que los de los portales de empleo tradicionales», ha explicado el director de Enviroo.

Otro ejemplo de emprendimiento con tintes ambientales es «Emprendae», una iniciativa de tres amigos que apostaron en agosto de 2011 por añadir a la «tradicional» consultoría ambiental aspectos sociales, y sus proyectos tocan temas tan dispares como la bioconstrucción, el apoyo a otros «ecoemprendedores» o el diseño de un proyecto de lucha contra la pobreza en Angola.

Según uno de los jóvenes socios de esta empresa, Luis Morales, con la crisis estas ideas tienen «mejor acogida», ya que «la gente busca algo distinto» y aunque hay «problemas de liquidez», se pueden para lanzar proyectos innovadores y sostenibles: «es ahora o nunca».

Fuente: EFE verde