Los responsables de las ONG ambientales esperan que los jefes de Estado y de Gobierno que asistirán el próximo martes a la reunión convocada por el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, en Nueva York para abordar el cambio climático presenten compromisos y propuestas «valientes y ambiciosas» para que la reunión de unos resultados aceptables, aunque consideran que falta «voluntad real» por parte de los gobiernos.

Así, en declaraciones a Europa Press, el responsable del área de Energía de Ecologistas en Acción, Rodrigo Irurzun, ha manifestado que esperan «poco» de esta cumbre porque es a lo que los líderes mundiales tienen «acostumbrados» a los ciudadanos.

A su juicio, en este tipo de cumbres no hay una voluntad real y en esta cita de Nueva York, los compromisos ambiciosos que serían necesarios «no están sobre la mesa de ningún país ni región, ni siquiera en la de la Unión Europea, considerada líder en la lucha contra el cambio climático».

Irurzun cree que para solucionar el problema se requieren compromisos «vinculantes y obligatorios» y cuyo incumplimiento conlleve sanción. «Pensamos que no se va a avanzar mucho. Los cambios necesarios son de tal calado que, o la comunidad internacional avanza en ese compromiso o es difícil que unos pocos vayan hacia una determinada dirección», ha manifestado.

Respecto a la delegación española, que estará encabezada por los Reyes Felipe y Letizia, ha apuntado que puesto que los reyes «en general suelen ser diplomáticos y comedidos» cree que don Felipe no especificará ningún compromiso concreto, que es lo que sería «deseable». Por ello, cree que los pasos que se puedan dar la próxima semana serán insuficientes para llegar a un acuerdo vinculante contra el cambio climático en 2015 que, por otro lado, ha recordado que debió firmarse en 2009 en Copenhague.

Menos pesimista, la portavoz de la campaña de cambio climático de Greenpeace, Tatiana Nuño, ha destacado que la reunión de la próxima semana será un evento «muy importante» donde Ban Ki Moon reunirá a los jefes de Estado y de Gobierno que deben plantear medidas innovadoras y ambiciosas dentro de los estándares para frenar el cambio climático en temas como deforestación, eficiencia, reducción de emisiones o compromisos para el Fondo Verde. «Se trata de presentar propuestas para que en las Cumbres se pueda llegar a compromisos reales», ha comentado.

En cuanto a la participación del monarca en la ONU, cree que su presencia en la ONU es positiva pero ha recordado que, de momento, Greenpeace no tiene notificación de que don Felipe vaya a intervenir en el encuentro del día 23.

En todo caso, considera que para ir en la buena dirección España debe dar un «giro absoluto» a sus políticas climáticas y, junto a la UE, adoptar compromisos ambiciosos como una reducción del 55% las emisiones, lograr un 45% de energía renovable y llegar a un 40% de eficiencia. Esto pasa, a su juicio, por no autorizar nuevos pozos de petróleo, ni favorecer el fracking o la ampliación de centrales térmicas. «Esperemos que los países no se limiten a hablar de la gravedad del cambio climático sino a presentar objetivos», ha deseado.

Marcha popular por el clima del pasado domingo en Nueva York http://www.weather.com/

Una lección de los ciudadanos

Así, el director de conservación de WWF, Enrique Segovia, ha destacado que quien se está moviendo «verdaderamente» son los ciudadanos de todo el mundo y confía en que, «al menos» todos los grandes líderes que se juntarán en Nueva York escuchen «el clamor de la calle y estén a la altura de lo que se espera de ellos», al tiempo que empiecen a plantear los compromisos que cada Gobierno asumirá para combatir el calentamiento global.

Por eso, confía en que las movilizaciones que se celebrarán tanto en la ciudad estadounidense como en numerosas ciudades de todo el mundo sirvan como «presión» a los gobernantes porque se necesitan respuestas «rápidas» puesto que «el tiempo se ha echado encima».

«Por lo menos estarán todos los líderes juntos y se escucharán los unos a los otros. Que sean lo suficientemente ambiciosos como para avanzar», ha manifestado Segovia que, por otro lado, no espera que España haga una declaración sorprendente o ambiciosa porque irá en bloque con la Unión Europea y por «su trayectoria» en esta materia.

Al mismo tiempo, cree que este será el momento para que Estados Unidos de «un paso adelante» y cree que su presidente, Barack Obama, tiene una «gran oportunidad para que empiecen a cambiar las cosas» si lanza una propuesta valiente puede ejercer de impulso para países como China, India o Brasil, que están menos comprometidos aún.

Respecto a la representación española, ha dicho que desde WWF se valora positivamente que Felipe VI encabece la delegación a esta reunión convocada por Ban para juntar a los líderes mundiales y que éstos empiecen «a retratarse» sobre la cuestión.

Por otro lado, ha pronosticado que en la próxima Conferencia de las Partes de Lima (Perú) los países latinoamericanos jugarán un papel «muy relevante» y cree que cuando estas citas se celebran en América Latina tienen «más avances». «Creo que habrá una presión fuerte de los países latinoamericanos para que en Lima se sienten las bases de un tratado en París verdaderamente ambicioso», ha concluido.

Una oportunidad para el Rey

Mientras, el responsable de políticas ambientales de SEO/BirdLife, David Howell, espera del Rey una «gran novedad» porque el secretario general de la ONU pidió propuestas «innovadoras y compromisos serios» y se trata de una de las primeras intervenciones internacionales de Don Felipe.

De hecho, ha apuntado que entre las novedades, el Rey podría presentar en Nueva York un plan de acción que prepara el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para luchar contra las fuentes difusas, aunque para ello, debería estar aprobado por el Gobierno porque el monarca «no dirá nada que no cuente con el visto bueno del Ejecutivo». «Si el Rey tiene algo interesante que decir, supongo que irá en esa línea», ha apostado.

Sin embargo, cree que esa propuesta para reducir las emisiones se centra en los sectores difusos (transporte, agricultura, edificación) porque el Gobierno «no ha querido molestar a los sectores fósiles».

Por eso, ha manifestado que este plan, el fomento de las energías renovables y favorecer la interconexión eléctrica debe formar parte de la «apuesta de España» y que si no hay ninguna novedad de ese tipo supondría «un fracaso para el país».

Finalmente, ha recordado que el llamamiento de Ban pretende crear el clima de confianza suficiente y verdadero para que los países se tomen de una vez en serio lo que dice la ciencia y comiencen a actuar con suma rapidez.

Marcha popular por el Clima

Miles de personas secundaron este domingo las marchas convocadas en 2.808 ciudades para pedir medidas urgentes para frenar el cambio climático. Una de las manifestaciones más multitudinarias ha sido la de Nueva York, donde más de 300.000 personas, según los convocantes, salieron a la calle en Manhattan.

«Este es el planeta en el que vivirán las próximas generaciones. No hay ‘plan B’ porque no tenemos un ‘planeta B'», dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, presente en la Marcha Popular por el Clima de Nueva York.

Otros rostros conocidos asistieron a la manifestación, como la primatóloga inglesa Jane Goodall, el actor Leonardo DiCaprio, flamante representante de la ONU para el cambio climático, o la ministra de Ecología francesa, Ségolène Royal.

Desde la organización de la marcha de Nueva York destacan que ha sido la movilización más importante sobre cambio climático de los últimos cinco años –desde la marcha de Copenhague de 2009– y que el objetivo es transformar el cambio climático «de una cuestión medioambiental a una cuestión que afecta a todo el mundo».

Fuente: EuropaPress