Casi cinco años han pasado ya desde que la Unesco diera el visto bueno de forma oficial a la reserva de la biosfera entre Andalucía y Marruecos y es a partir de ahora cuando comenzará a echar a rodar verdaderamente. Ayer el Gobierno español, la Junta de Andalucía y el Alto Comisionado de Aguas y Bosques y la Lucha contra la Desertificación del Reino de Marruecos sentaron las bases del plan que definirá las actuaciones que se desarrollarán hasta 2015 y que tendrá en la conservación de los espacios naturales de ambos países y en la creación de nuevas posibilidades de empleo y desarrollo sostenible sus principales objetivos.

La Reserva de la Biosfera del Mediterráneo es la única intercontinental que existe en el mundo. La ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, Rosa Aguilar, firmó ayer en Málaga con el alto comisario de Aguas y Bosques y la Lucha contra la Desertificación del Reino de Marruecos, Abdeladim Lhafi, y con el consejero de Medio Ambiente de la Junta, José Juan Díaz Trillo, un memorándum para poner en marcha los mecanismos de colaboración necesarios para la consolidación de la Reserva de la Biosfera.

El acuerdo estará vigente durante cinco años. Durante este periodo se crearan órganos de coordinación transfronteriza para la consolidación de la reserva, y se elaborarán herramientas de gestión para la aplicación de los planes en los espacios protegidos.

Estrecho de Gibraltar, nexo de la Reserva de la Biosfera del Mediterráneo . Foto: Flickr Gaspar Serrano

Casi un millón de hectáreas conforman el territorio de la reserva que se reparte en Andalucía por cuatro parques naturales (Grazalema, Sierra de las Nieves, de Los Alcornocales y del Estrecho), y discurre en Marruecos por Chaouen, Larache, Tánger y Tetuán. El plan pretende potenciar el desarrollo territorial con la sensibilización ambiental y la participación social, para ello se pondrán en marcha programas para fomentar el desarrollo de un un turismo basado en la sostenibilidad.

La preservación de la Biosfera creará nuevos yacimientos de empleo, «un empleo que mirará hacia los jóvenes», según destacó Rosa Aguilar tras la firma del memorándum. Desde que la Unesco declaró la Reserva de la Biosfera Intercontinental del Mediterráneo se han celebrado 20 reuniones entre los dos países donde «se ha trabajado intensamente para elaborar la columna vertebral del plan de acción», aseguró la ministra.

La base del proyecto es trabajar sobre un modelo de desarrollo sostenible, donde se produzca un fortalecimiento de la reserva, y donde se integren a las dos poblaciones. «El Estrecho de Gibraltar es un símbolo en la unidad de éste espacio«, comentó el alto comisario de Marruecos.

Lo que aún no está tan claro es la financiación con la que contarán para poner en marcha estas propuestas. Ninguna de los tres representantes se atrevió a dar ninguna cifra de la inversión de la que se dispone, aunque el alto comisario marroquí de Aguas y Bosques y la Lucha contra la Desertificación, Abdeladim Lhafi, se mostró convencido de que a través de los distintos convenios y programas europeos e internacionales en esta materia «se podrán encontrar distintas vías de financiación», ya que destacó que se trata de ecosistemas «muy frágiles» debido a la influencia del clima mediterráneo y que «podrían verse aún más perjudicados por la incidencia del cambio climático».

fuentes: http://www.elpais.com y http://www.malagahoy.es