Según Bruselas, alrededor del 25 % de los residuos enviados por países de la UE a estados africanos y asiáticos podrían contravenir regulaciones internacionales debido a que las inspecciones no son adecuadas en todos los Estados miembros.

“Es momento de controles más estrictos en todos los Estados miembros, esa es la mejor forma de evitar que los exportadores deshonestos se aprovechen del sistema”, señaló en un comunicado el comisario europeo de Medio Ambiente, Janez Potocnik. Según el responsable europeo, la propuesta de la CE “ayudará a reducir la mala gestión de residuos, a asegurar un tratamiento correcto de los desperdicios peligrosos y a reutilizar recursos valiosos”.

Bruselas denuncia que algunas empresas se aprovechan de los laxos controles que aplican ciertos países europeos para utilizar sus puertos como punto de partida para exportar residuos sin cumplir con las normas. La CE propone que los Estados miembros lleven a cabo inspecciones regulares, con más cooperación entre las autoridades y una mejor formación de los inspectores.

Además, quiere que esas investigaciones se hagan de forma más temprana, ya en puntos de recogida y de almacenamiento.

Residuos electrónicos en Ghana. Imagen: http://www.corresponsaldepaz.org/

Según la Comisión, los bajos costes de tratamiento de residuos en países en desarrollo llevan a numerosas empresas a optar por su envío fuera de Europa.

Esos bajos costes se deben, principalmente, a las normas medioambientales y de salud menos estrictas que se aplican en esos países, donde en muchos casos los residuos causan daños en el medio ambiente por su mala gestión.

Las normas europeas ya prohíben la exportación de residuos peligrosos a un buen número de países, pero no prevén explícitamente qué tipo de inspecciones deben llevarse a cabo para que se cumpla la legislación, un problema con el que Bruselas quiere terminar ahora.

Fuente: EFEverde