Las prácticas agrícolas, la presión urbanística, el ocio en el entorno y la falta de planes de gestión específicos son algunas de las amenazas principales que sufre la Red Natura 2000, según ha explicado el responsable de conservación de SEO/BirdLife, Juan Carlos Atienza.

Con motivo de la celebración este miércoles del Día de la Red Natura 2000, Atienza ha señalado que la Red Natura 2000 se compone de 26.000 espacios, que ocupan el 30 por ciento de la superficie de España y que el 80 por ciento de los españoles vive en un municipio con un espacio de la red.

Sin embargo, a pesar de la dimensión de la red, ha subrayado que la mayoría de los países aún no han aprobado planes de gestión específicos para estos espacios, que concreten las medidas que se deben tomar, las actividades que se pueden o no realizar en estos enclaves. «Si tuviéramos estos documentos, sería más sencillo evitar las amenazas y contribuiría a su conocimiento por parte de los ciudadanos», ha valorado.

Mapa de la Red en España

Además, los principales problemas a los que se enfrentan son las prácticas agrícolas, que son una «amenaza grave» para las especies que viven en el campo; la presión urbanística; las ‘molestias’ humanas, que están asociadas al ocio humano, cuando, por ejemplo se practica el montañismo o el barranquismo sin saber los impactos de esta actividad en un lugar concreto o en un territorio específico.

Asimismo, ha añadido que en España han tenido un impacto «muy grande» sobre la Red Natura 2000 «todo tipo de infraestructuras» tras unos años de un desarrollo enorme y que ha provocado problemas de carácter importante en los espacios y en las especies.

Atienza ha indicado que estas amenazas son «bastante comunes» a todos los países de la Unión Europea y ha apuntado que la situación depende, en gran parte, de las políticas sectoriales que se adopten, por ejemplo en la agricultura o la ganadería.

Fitosanitarios y urbanizaciones

En este contexto, ha precisado que los mayores problemas para la biodiversidad dependen de las políticas sectoriales; de la explotación de los acuíferos; del estado de conservación de los ríos; de la intensificación de la agricultura, la homogeneidad en los cultivos, el elevado uso de fitosanitarios; las políticas sectoriales de urbanismo, que promueven urbanizaciones en bosques; o de las políticas de industria, con cientos de parques eólicos en áreas aisladas, a las que se tienen que hacer nuevos caminos para llegar.

«Las amenazas llegan más de ahí que de un uso o explotación intensiva por parte de los ciudadanos. Por ello, estas cuestiones se podrían solucionar con voluntad de los Gobiernos», ha concluido.

El Día de la Red Natura 2000 es una iniciativa que partió hace tres años de la organización SEO/BirdLife y que se ha consolidado este año, en el que se han sumado 17 países más. El objetivo de la campaña es la divulgación de esta red, con el fin de que los ciudadanos la conozcan, valoren y cuiden.

Atienza ha declarado también que la ONG aspira a que este día de la Red Natura 2000, se convierta en día oficial instaurado por las instituciones comunitarias y que, a nivel ciudadano, se pueda comparar con la campaña social de WWF ‘La hora del planeta’ «o superarla».

En este sentido, ha destacado que Birdlife es la organización más grande por número de socios y en número de países, en más de 120 países y con mayor número de socios del mundo, por lo que espera que con el paso de los años los ciudadanos se impliquen en esta campaña de conservación de espacios de la Red Natura 2000.

Finalmente, ha elogiado la participación del colegio Educrea, de Villalbilla (Madrid) que ha compuesto e interpretado la primera canción sobre la Red Natura 2000 y ha hecho un llamamiento a participar en la campaña y en las actividades de la ONG en distintas ciudades españolas.

Con todos los gestos recibidos se va a desarrollar un proyecto de conservación en Doñana, uno de los espacios de la Red Natura 2000 más emblemáticos de Europa. Con cada gesto se restaurarán 25 metros cuadrados del arroyo de La Rocina, y se retirarán 16 gramos de perdigones de plomo, lo que potencialmente equivale a salvar 25 gansos.

Fuente: Europapress